Según cuenta la novia, aunque ella es de Cáceres, él es de Bilbao, ‘muy muy de Bilbao’, y claro, Txus y Mónica tenían que casarse en Bizkaia como no podía ser de otra forma.
Después de llevar casi 10 años juntos y tener a Gorka, un bebé de 1 añito, se dieron cuenta de que hay que celebrar las cosas buenas de la vida, porque las malas llegan sin que uno quiera. La madre de Mónica falleció en enero y fue entonces cuando se dieron cuenta de toda la gente maravillosa que tenían alrededor, así que, decidieron juntarlos a todos el 29 de Septiembre de 2018, para hacer una fiesta y celebrar lo mucho que se quieren.
El viñedo fue el dichoso culpable de que eligieran ENEKO para su enlace. Querían una ceremonia al aire libre y en cuanto vieron nuestro espacio rodeado de viñas, no tuvieron dudas.
El vestido de Mónica fue un regalo de su hermana Bea, su wedding planner particular. Fue confeccionado en “De Arroyo Atelier” en Madrid: “Petra Arroyo y su hija Mariló me asesoraron, me ayudaron e hicieron todo lo que estuvo en sus manos para hacerme sentir cómoda desde el primer momento, y al final, mi vestido fue más bonito de lo que me había imaginado. Sabía que no quería ir vestida de novia tradicional y acertaron de pleno con mi estilo. Los zapatos también me los hicieron en el Atelier, porque con un 35 de talla no es fácil encontrar un zapato cómodo y con taconazo”, cuenta Mónica.
Por el contrario, el tocado fue toda una casualidad. Aquí en Euskadi el cielo tiene la mala costumbre de llover, y claro, la humedad suele hacer estragos en el pelo de muchas personas. Ese también fue el caso de Mónica. Cuando faltaban 5 días para el gran día, visitó a Anita Ribbon y con el vestido se probó esa maravilla de diadema… ¡y salió con ella de la tienda!
Txus decidió convertirse en esposo con un traje de Hugo Boss, perfectamente combinado con una camisa de BBaillere en Alameda Urquijo y unos zapatos de la firma zapatera Urru Bilbao, unas tiendas ‘muy muy de Bilbao’.
Las chicas de Im Miu salón Bilbao maquillaron y peinaron a Mónica y a su hermana, quien por cierto optó por llevar una pamela espectacular también de Anita Ribbon y elegida a 5 días de la boda.
Lo que Mónica tenía claro desde que comenzaron los preparativos de la boda fue el ramo: “Quería que fuera de Lucía B, porque la sigo desde hace tiempo y me encanta. Además, tiene un slogan precioso que dice sé la novia que quieras ser que se me quedó grabado desde que lo leí.”
Tanto Txus como el padre de la novia llevaban el botonier a juego aunque a este último le duró puesto 5 minutos.
Rubén, de FTD, consiguió captar los momentos más emotivos de este día y realizar estas preciosas fotografías.
La música, el DJ, el oficiante y el fotomatón corrieron a cargo de BK Music, que fue en palabras de Mónica “Un auténtico puntazo. Además, el photocall fue totalmente hecho a mano por mi hermana y quedó genial. Queríamos una boda con rock&roll y ¡la tuvimos!”.
El menú elegido por la pareja nos pareció todo un acierto.
El cocktail de bienvenida estaba compuesto por aperitivos cocinados en directo y otros que salían desde la cocina:
En directo:
Vermut
Kaipiritxa
Frutos del mar con bruma del cantábrico
Cucuruchos de centollo y hierbas
Salmón acompañado de salsa tártara
Desde Cocina:
Jamón ibérico acompañado de tosta de pan y tomate de nuestro caserío
Infusión de setas
Queso de Etxano caramelizado, emulsión de tomate y lascas de jamón
«huevos fritos» con polvo de hongos
Langostino en tempura
Croquetas melosas y recién hechas
Pan de leche y carne confitada y desmigada con Idiazábal y brotes
Cochinillo crujiente y ligeramente picante con emulsión de albahaca
Ya en mesa, el menú consistía en:
Gatzatua de foie con manzana al txakoli
Vieiras asadas, jugo de ave y confitura de tomate
Merluza crocante y jugo de pimientos a la brasa
Sorbete de limón al txakoli
Rabo deshuesado con duxelle y pil pil de coliflor
Torrija caramelizada con helado de leche merengada
“Para mí lo mejor fue el cocktail, especialmente la kaipiritxa y el cochinillo, y para Txus, el rabo de toro” nos confiesa la novia.
La boda estuvo llena de momentos muy emotivos. El primero tuvo lugar con las lecturas de la ceremonia, de las“dos Elenas”, como las llaman cariñosamente. Una, era amiga de toda la vida de la novia, que sorprendió a todos con un discurso de ‘sonrisas y lágrimas’; y la otra, la hermana de Txus.
Otro de los momentos que no olvidarán fue cuando la hermana de Mónica les regaló un vídeo que había hecho con fotos de los novios de pequeño, que fue especialmente sentido por Mónica y su padre.
Y el sorpresón de la noche corrió a cargo de Txus, cuando ya estaban en la cafetería, comenzó a cantar a Mónica la canción “Dream on” de Aerosmith.
La fiesta continuó hasta las 12.30h, hora a la que salía el último autobús, y aunque se “hubieran quedado mil horas más” decidieron continuar la fiesta en Bilbao.
Desde ENEKO WEP solo queremos dar las gracias a esta pareja tan especial y pedirles que sigan celebrando todo lo bueno siempre.
Eskerrik asko!